Casa de Semillas

Mujeres: 31

Hombres: 31

Comunidades: 3

Objetivo del programa:

La casa de semillas representa un espacio fundamental para la conservación de la biodiversidad agrícola y el fortalecimiento de la soberanía alimentaria en las comunidades. Su función principal es resguardar y proteger semillas nativas y criollas, muchas de ellas adaptadas a las condiciones locales y portadoras de saberes ancestrales. 

Acerca de …

Las casas de Semillas  no solo garantizan la disponibilidad de semillas para futuras siembras, sino que también permite su reproducción, mejora y adaptación continua. Además, mediante el intercambio de semillas con otras comunidades, se fomenta la solidaridad, el fortalecimiento de redes campesinas y la recuperación de variedades en riesgo de pérdida. Estos intercambios también permiten compartir conocimientos y técnicas de cultivo, enriqueciendo el patrimonio agroalimentario colectivo y fortaleciendo la autonomía de las familias productoras frente a las dependencias externas.

Logros

  • Conservación de la biodiversidad agrícola
  • Fortalecimiento del intercambio comunitario
  • Soberanía alimentaria
  • Adaptación al cambio climático
  • Recuperación y transmisión de saberes ancestrales
  • Autonomía y empoderamiento comunitario

Desafíos 

  • El almacenamiento de las semillas es susceptible a plagas 
  • La conservación de semillas debe mantener condiciones adecuadas de humedad

Impactos del Programa

  • Permite resguardar semillas nativas y criollas adaptadas a las condiciones locales.
  • Ayuda a evitar la pérdida de variedades tradicionales frente al avance de semillas comerciales o transgénicas.
  • Facilita el intercambio de semillas entre comunidades, promoviendo la colaboración y el fortalecimiento de redes campesinas.
  • Estimula el intercambio de conocimientos tradicionales sobre agricultura, conservación y uso de las semillas.
  •  Reduce la dependencia de semillas comerciales y de agroindustrias externas.
  • Su conservación permite mantener opciones diversas para enfrentar futuras crisis alimentarias. 
  • Empodera a las comunidades, especialmente a las mujeres y juventudes, al darles un papel activo en la producción, selección y conservación de semillas.
  • Refuerza la organización local y la toma de decisiones colectivas.